Cifras de Venezuela según el INE.

jueves, 3 de abril de 2008

Comprensión de la Epiqueya




Para Aristóteles la ley natural rige nuestras conductas y actuaciones, y ello, a su vez obedece a nuestra naturaleza, la cual conduce a comportarnos según como somos. Este filósofo griego, admite que pertenecemos a una misma especie humana; regida por una ley natural que nos determina. Además la comunidad crea y promulga una ley positiva que obliga a todos a respetarla y obedecerla. Pudiéndose establecer convenios o acuerdos racionales que sustentan las leyes en aras a la organización para el desarrollo. El irrespeto de estas leyes nacidas de la comunidad, requiere una sanción que reprenda y estimule para no inflingirlas. Debiendo formularse sanciones más graves para exigir el cumplimiento de las leyes más importantes vinculadas con los derechos de mayor entidad.
El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, señala que el vocablo epiqueya constituye una interpretación moderada y prudente de la ley, según las circunstancias de tiempo, lugar y persona.
La propuesta aristotélica de la epiqueya, supone la actuación bajo el principio de la epiqueya o moderación. Las posibles contradicciones con el deber ser del derecho positivo plasmado en leyes escritas; frente a las leyes naturales y el deber ser moral, requiere una propensión hacia un lado de la balanza; y ello constituye el sentido de la epiqueya, o visión de equidad.
Ajustar la ley, mediante una actividad interpretativa en conjunción con el buen sentido, con aras de llevar a contexto la aplicación de la ley, mediante la razón, representa la finalidad de la epiqueya.
La filosofía aristotélica (en cuanto a sus postulados éticos) y el renacimiento científico subrayan la esencia racional del ser humano, y la noción de libre albedrío hace que la capacidad de actuar esté muy vinculada a la libertad volitiva y no a un simple mandato del azar o el destino. De allí que cada conducta (activa u omisiva) que requiera un plano de acción social, debe emerger de una reflexión y análisis del contenido moral aprehendido y comprendido; a fin de ajustar nuestro actuar en la toma de decisiones adaptadas a nuestras propias circunstancias, sin que la relatividad de éstas nos haga autómatas y fríos.
Epiqueya es respetar nuestra naturaleza humana y acercar nuestra noción de equidad y justicia al contexto de la realidad.
Existen muchos ámbitos que requieren una interpretación de la epiqueya y de la equidad; pues no sólo la podemos aplicar al mundo jurídico; sino a todo aquello que se relacione con el mundo humano y la realidad.
La epiqueya de la ley, es la interpretación de la norma ajustada a la realidad y al buen sentido.

1 comentario:

Mariadolores dijo...

Que buen reportaje!! es muy interesante, de verdad no tenía conocimiento sobre la epiqueya!